SAN WENCESLAO DE
BOHEMIA
929 d.C.
28 de septiembre
Nació en Stochov. Hijo del príncipe, ya cristiano,
Vratislao I de Bohemia y de su esposa pagana, Drahomira, fue bautizado
por un fraile eslavo discípulo del apóstol san Metodio.
Educado, desde su infancia, en la fe cristiana, especialmente
influenciado por su abuela santa Ludmila, fue enviado al liceo de la
iglesia de San Pedro en Budeé donde aprendió
latín, y bajo la guia de un docto maestro se preparó para
asumir sus responsabilidades de gobierno y de buen cristiano. Tuvo una
especial veneración por la Eucaristía y por María,
que le llevó a consagrarse a Ella, en voto de castidad perpetua.
Tras la muerte accidental de su padre en el año
921, Drahomira asumió el poder y no se mostró acorde con
la fe del joven Wenceslao que buscó refugio en casa de su abuela
Ludmila que fue estrangulada, por orden de su nuera. El caos se
apoderó del ducado de Bohemia y el duque Arnulfo de Baviera se
aprovechó de esas circunstancias para invadir el país
durante la primavera de 922. Venceslao accedió al trono dos
años más tarde, tras un golpe de Estado.
Hacia el 925, Wenceslao tomó oficialmente el poder
y luchó contra las intrigas de su madre: "si Dios te causa
fastidio, ¿por qué quieres impedir a otros de amarlo?" y
la relegó a Budec. El ideal de su reinado fue impulsar el
progreso cristiano de su pueblo. Visitó a los pobres, a los
enfermos y hasta los mismos presos, cuya legislación penal tanto
había humanizado, ya que suprimió la tortura y la horca.
Hizo erigir la catedral de Praga (entonces iglesia de San Vito).
Su profunda vida de piedad le llevó a aparecer
siempre como un ejemplo para los ciudadanos, en el trabajo de la paz y,
para los soldados en el riesgo de la guerra. En este mismo ideal de su
reinado se encontró enseguida con la hostilidad de los grandes
señores, amigos del paganismo, que le impedían incluso
tratar con el clero. Enrique I el Pajarero de Germania quiso entonces
invadir Bohemia pero Wenceslao le propuso firmar un pacto de no
agresión cuya paz costó 129 vacas y 500 talentos de plata
por año, algo habitual en esa época: Wenceslao
prefería la paz a la guerra. Muchos compañeros del
soberano, incluido su hermano Boleslao, aceptaron a la fuerza este
proceder.
Vivió rodeado de intrigas y conjuras de parte del
partido pagano que encabezaba su madre, que prefería a su hijo
menor Boleslao. Para deshacerse de él, la oposición
encabezada por su hermano, no encontró otra solución que
hacerlo morir a manos del propio Boleslao, con ocasión de un
convite familiar en el castillo de Stará Boleslav, mientras
oraba en el templo antes de entregarse al sueño. Dicen que pudo
defenderse y que eligió ser victima, que tiró su espada,
y al ver a su hermano le dijo: "la diestra de un servidor de Dios no
debe ser fratricida". Patrón de Bohemia.