SANTA NOTBURGA DE EBEN
1313 d.C.
14 de septiembre
Natural del
Tirol de Rattenberg, hija de labriegos sin fortuna, se la
contrató como cocinera en el castillo de un gran señor
local, el conde Enrique de Rottenburg, que le permitió ejercer
la caridad con los pobres, repartiéndoles comida y vestidos,
pero sus yernos no lo veían con buenos ojos, tuvo problemas con
sus amos por exceso de generosidad y fue despedida por dar a los pobres
la comida destinada a los cerdos.
Luego trabajó en casa de un granjero de Eben, que
le prohibía rezar el Ángelus, pero milagrosamente
conseguía hacer todos sus trabajos. Después volvió
a su antiguo trabajo de Rottenburg, después de que la pidieran
perdón sus antiguos amos. Murió en paz. Sus restos son
muy venerados en la región y descansan en la capilla de Eben. En
1862, el Papa Pío IX confirmó su culto local como patrona
de los pobres campesinos y siervos asalariados.