SANTA EMMA DE BREMEN
19 de abril
1040 d.C.
Nació en el ceno de la noble familia sajona de los Immedinger,
descendientes de Widukind. Ella era la hija de Conde Immed (o Imad) de
la diócesis de Utrecht y también, según
Adán de Bremen, hermana de Meinwerk, obispo de Paderborn. Se
casó con Ludger, hijo de Duque Hermann Billung y hermano de
Bernardo I, Duque de Sajonia. El emperador Otón III, en el
año 1001, regaló a la pareja el "Pfalz" o "palatium" de
Stiepel (ahora Bochum-Stiepel), donde en 1008 Emma construyó una
iglesia dedicada a María, que más tarde se
convertiría en lugar popular de peregrinación. El
único hijo del matrimonio fue Imad, consagrado como obispo de
Paderborn.
Después de la temprana muerte de su marido en 1011 [en algunos
documentos se cuenta que, hasta la muerte de su marido, ella
tenía un carácter muy explosivo y violento que de vez en
cuando la conducía a cometer actos de violencia física],
Emma se mudó a Lesum (ahora Bremen-Burglesum), y con su fortuna
generosamente apoyaba a la catedral de Bremen, donde el arzobispo Unwan
era otro de sus parientes, concedió a la catedral su propiedad
en Stiepel con su iglesia. Ella es descrita como una gran benefactora
de la iglesia, y de verdad fundó varias templos en la zona de
Bremen, aunque su mayor preocupación eran los pobres.
Emma más tarde fue venerada como santa, aunque no
haya ninguna prueba de que ella formalmente haya sido beatificada o
canonizada. Fue enterrada en la Catedral de Bremen, donde su tumba
todavía podía ser vista en el siglo XVI.