SAN SÉRVULO "EL
PARALÍTICO"
23 de diciembre
590 d.C.
En
Roma, conmemoración de san Sérvulo, el cual,
paralítico desde la primera infancia, recostado en un
pórtico, cerca de la iglesia de san Clemente, daba siempre
gracias a Dios en el dolor, como escribe san Gregorio I Magno, y lo que
recogía en limosnas lo daba a los pobres.
Era paralítico de nacimiento y pedía limosna en la
iglesia de San Clemente en Roma. Todo lo que ganaba lo repartía
con aquellos que tenían más necesidad de él. Era
ignorante, pero se hacía leer pasajes del Evangelio, de las
personas, que le daban limosna, de este modo aprendió el
Evangelio de memoria, y su boca no pronunció otras palabras que
de agradecimiento a Dios y de alabanza, hasta su muerte; en su tumba
sucedieron muchos milagros. San Gregorio Magno, habla de él en
sus Diálogos.