SAN PEDRO CHONG WON-JI
13 de diciembre
1866 d.C.
Pedro Chong Won-ji había nacido en
Chinjam, provincia de Chungchong, en 1846, en una familia cristiana. Su
padre al poco murió mártir y su madre murió cuando
él era niño, de modo que muy pronto se vio solo, y anduvo
de un sitio a otro. Por fin recaló en Songji Dong en Chonju. Era
un chico creyente, bueno, respetuoso y trabajador. San Pedro Cho Hwa-So
lo recogió en su casa, y se hizo muy amigo del hijo de su
bienhechor, Yun-ho, que era casi de su misma edad. Contrajo matrimonio
con una chica católica y con ella rezaba cada día las
oraciones. Trataba a san Pedro Cho Hwa-So como a un verdadero padre.
Con su hermano mayor trabajaba en una granja.
Cuando se empezó a hablar de que iba a haber una nueva
persecución, él le dijo a su esposa que estaba dispuesto
a ser mártir. Cuando la policía irrumpió en la
casa y arresto a san Pedro Cho Hwa-So, él huyó las
montañas pero al día siguiente volvió. Lo
encontró la policía y cuando ésta le
preguntó si era católico dijo que no, pero aún
así fue arrestado y llevado a la calle principal donde estaban
los otros cristianos arrestados. Volvieron a preguntarle si era
católico y él, pensando en su joven esposa, volvió
a decir que no. Pero Pedro Cho Hwa-So le animó a que confesara
su fe y entonces el joven dijo claramente a la policía que
él sí era católico. A la policía le dio
lástima de su juventud y le dijeron que siguiera negando su fe y
sería libre pero él estaba ya decidido a seguir
confesando la fe. Llevado a Chonju con los demás, volvió
a titubear y otros se sintieron también en duda, pero san Pedro
Cho Hwa-So los consoló y animó y juntos pidieron fuerza
al Señor. Ante el magistrado recordó que era hijo de un
mártir y confesó la fe. Pidió que no le
atormentaran más sino que lo mataran ya. Fue decapitado con los
demás mártires.