SAN MAGNO DE ORKNEY
16 de abril
1116 d.C.
Conde
de las Orcadas. Nació cerca de Erling, en las Orcadas. Parece
que fue pirata antes de su conversión al cristianismo. Su primo
Haakon fue exiliado a la corte de Noruega por su afán en
intervenir en la política de su patria. Éste
juró vengarse y convenció al soberano noruego de iniciar
una guerra contra las Orcadas. Magno fue nombrado gobernador por
el rey de Noruega, entonces señor supremo de las islas.
Magno se vio obligado
a participar en las violentas incursiones sobre las costas occidentales
de Escocia e Inglaterra. Cuando la flota noruega llegó a
Anglesey, se encontró con las flotas inglesas y galesas, pero
Magno decidió no combatir contra aquellos que no tenían
la culpa. Fue apresado pero se escapó a Escocia. Arrepentido de
su vida anterior, inició un periodo de oración y
penitencia.
Al quedar vacante el
gobierno de las Orcadas, Haakón quiso apoderarse
ilegítimamente del poder y Magno no dudó en capitanear un
ejército en contra de su primo. Durante un breve periodo los dos
cohabitaron en una tregua no muy pacífica. Haakón,
queriendo eliminar a su primo, lo invitó con engaños a
una conferencia de paz. Hizo que lo mataran en Egilsay, Magno
rechazó defenderse y murió orando por sus asesinos. El
asesinato fue por razones políticas, pero fue considerado
erróneamente como martirio a causa de la justicia, "per
testimonium caritatis heroicis".
Está enterrado en
la catedral de Kirkwall, en las Orcadas, que le fue dedicada. Su culto
está difundido en Escocia, Islandia y las islas Feroe, donde
numerosos milagros se le han atribuido a su intercesión. El Papa León XIII confirmó su
culto el 5 de julio de 1898.