SAN FIDEL DE SIGMARINGA
24 de abril
1622 d.C.
Se llamaba
Markus Roy, hijo del burgomaestre de Sigmaringen (Suabia, Alemania),
donde nació (entonces principado de Hohenzollern).
Estudió en la universidad (entonces colegio de los jesuitas) de
Friburgo de Brisgovia o Brisgau y, luego en la de Willingen, donde se
había trasladado la de Friburgo huyendo de la peste,
consiguiendo un doble doctorado (en Derecho y Filosofía) en
1611, y mientras tanto enseñó Filosofía.
Viajó por Europa (Francia, España e Italia) con la
familia de los Stotzingen, de la que era preceptor de sus hijos; el
viaje duró de 1604 a 1610. Ejerció la abogacía en
Ensisheim (Alsacia), ayudando a los más necesitados; fue llamado
"el abogado de los pobres". Pero fueron unas palabras de un
compañero suyo que le habló con tan poca seriedad de la
abogacía y la justicia humana e intentó sobornarle en un
caso, decidió tomar otro camino.
Intentó hacerse capuchino, como su hermano Jorge,
pero la edad, hizo que se le negase el ingreso, entonces pensó
en el clero diocesano y recibió el sacerdocio a los 35
años, en 1612; ingresó después en la Orden
capuchina en Friburgo de Brisgovia, donde recibió el nombre de
Fidel. Durante el año de su noviciado escribió para uso
personal, una colección de oraciones y meditaciones, que luego
fueron compilados con el título de "Exercitia spiritualia
seraphicae devotionis". Antes de emitir sus votos, en 1613,
redactó su "Testamento", con él fundó becas de
estudios para los jóvenes católicos pobres de la familia
Roy o de otros parientes. Durante cinco años estudió
silenciosamente Teología en Constanza. Se dedicó a la
predicación en el convento de Altdorf y al apostolado castrense
entre las tropas austriacas del emperador. Hasta su muerte fue
guardián en los conventos de Rheinfelden, Feldkirch, Friburgo.
Además se le encargó la asistencia espiritual de los
soldados.
Por fin fue enviado por la congregación De
Propaganda Fide a Retia para consolidar la fe contra los progresos de
la herejía calvinista, donde logró convertir al mismo
conde Rodolfo de Salis. Tuvo rasgos de marcado heroísmo durante
una epidemia de peste. Intentó la unidad entre católicos
y calvinistas. Se impuso a si mismo la penitencia como regla de
conducta: "He dado a Dios los bienes de la tierra y El me da el reino
de los cielos. ¿Puede haber permuta más ventajosa?".
Conociendo el gran peso de la acción clandestina de los
predicadores zuinglianos y preveyendo su martirio, redactó el
llamado "Mandato de castigo" o "Diez artículos de la
religión". La reacción contra el edicto que obtuvo la
proscripción del culto protestante en los Grisones, donde
Austria había puesto pie, provocó la violenta
reacción de los campesinos calvinistas, que, capitaneados por un
ministro (tras el golpe se convirtió), lo mataron a golpe de
maza y rematado de una puñalada en la puerta de la iglesia de
Seewis (Suiza), acusado de ser un agente político del emperador
de Austria. En el momento de su martirio dijo: “Señor
Jesús, ten piedad de mi. Santa María, socórreme”.
Antes de ejecutarlo le invitaron a abrazar la fe
calvinista, pero Fidel respondió: "He venido para luchar contra
la herejía, no para abrazarla". Cayó a tierra perdonando
a sus asesinos. Toda su vida se podía resumir en aquella famosa
frase que camino de Mayenfeld dijo a un compañero: "Dos cosas
pido a Dios de corazón: Pasar la vida sin ofenderle y derramar
mi sangre por la fe católica". Su cabeza se conserva en la
catedral de Coira. Protomártir de la Propaganda Fide. Primer
mártir capuchino. Fue canonizado por Benedicto XIV el 29 de
junio de 1746. Patrón de la región de Hohenzollern.