SAN ACACIO DE MELITENE
17 de abril
435 d.C.
Nació en Melitene, Armenia, en el seno de una rica familia y fue
educado por insignes maestros y literatos, el obispo Otrea lo
nombró preceptor de San Eutimio, el que luego será autor
de su “passio”. Antes del Concilio Ecuménico de
Éfeso (431), del que formó parte militando entre los
antinestorianos, fue nombrado obispo de Melitene. Acacio era amigo de
Nestorio, pero era evidente que sus posiciones eran totalmente
ortodoxas.
Acacio fue elegido,
junto con otros siete, para exponer ante el emperador Teodosio II las
quejas de los antioqueños, pero sus compañeros no dudaron
en contar al emperador otras acusaciones contra Acacio. Esto fue porque
eran nestorianos o habían participado en la consagración
de Nestorio a la sede de Constantinopla, además Juan de
Antioquía depuso a Acacio de su sede. Este último al
final se reconcilió con San Cirilo de Alejandría, pero
Acacio mantuvo una posición intransigente.
Hacia el 435, el ex obispo de Melitene se lamentaba que todavía
sobreviviera la herejía nestoriana, oficialmente superada y
decidió combatir a Teodoro de Mopsuestia, apoyando a Rabbula de
Edessa, enviando cartas a los obispos de Armenia acerca de la conducta
que debían contemplar. Parece que nuestro santo no
participó en las disputas monofisitas. En el 449 el concilio de
Melitene Acacio fue conmemorado como “nuestro padre y nuestro doctor”.