BEATO DAMIÁN
FURCHERI
1484 d.C.
26 de octubre
Natural del
pueblecito de Perti, cerca de Finario, que es actualmente Finale Borgo,
no lejos de Génova (Savona, Liguria), en el seno de la noble
familia de los Furcheri. Algunos historiadores muy posteriores cuentan
que, cuando Damián era aún muy niño, fue raptado
por un loco. Una luz milagrosa señaló a quienes lo
buscaban el sitio en el que el secuestrador había escondido al
niño.
Damián ingresó, bastante joven y a pesar de
la oposición de la familia, en la Orden de Santo Domingo y
llegó a ser un predicador muy famoso en Lombardía y
Liguria. Estudió con constancia y amor las Escrituras, de las
que extrajo la pura y sustanciosa doctrina de la que se nutrió
para su fructífera predicación. Encarnó en
sí mismo la divina palabra con la santidad de su vida.
Vivió en sí mismo la expresión “Renuncia a ti
mismo y sigue a tu Redentor”. Para ponerla en práctica su medio
infalible fue la oración, íntima y ferviente.
Murió en el convento de Reggio, cerca de Módena, donde se
había retirado para estar más en contacto con Dios; y
ahí fue sepultado. Después de su muerte, se le
atribuyeron numerosos milagros. Está sepultado en la iglesia de
San Domenico de Reggio Emilia. Su culto fue confirmado en 1848 por el
beato Pío IX.