BEATA CLEMENTINA
NENGAPETA ANURITE
1 de diciembre
1964 d.C.
Nació en Wamba, en la actual República Democrática
del Congo, en el seno de una familia pagana. Se convirtió al
cristianismo e ingresó, en 1956, en la Congregación
indígena de la Sagrada Familia, pronunciando los votos en 1959.
Dedicó varios años a la enseñanza en la escuela de
la misión de Bafwabaka.
El drama que la
llevaría al martirio estalló en 1964, en el contexto de
la guerra civil congoleña que había causado tantos
muertos entre los religiosos y religiosas que actuaban en el Alto
Zaire, en Kiwu, Kasay y Katanga. Las religiosas presentes en Bafwabaka
fueron deportadas por los simbas a Ibambi y después a Isiro.
Aquí Clementina, capturada por rebeldes simba, fue salvajemente
maltratada y asesinada por no sucumbir a las torpes pretensiones del
comandante Pierre Olombe que intento violarla dos veces, y que
Clementina perdonó antes de morir. Sus padres asistieron a su
beatificación en Kinshasa, perdonando a su asesino. Es la
primera congoleña elevada al honor de los altares. El 15 de agosto de 1985, el Papa
Juan Pablo II beatificó a la religiosa mártir, durante su
segundo viaje apostólico al entonces Zaire. Es la primera
congoleña elevada al honor de los altares.