BEATA CATALINA DE
MONTENEGRO
27 de abril
1565 d.C.
Su nombre de bautismo era
Catalina Cosie; había nacido en Kebeza, Montenegro, de padres
ortodoxos; trabajó como pastora, viviendo entonces una profunda
vida interior y recibiendo algunos carísmas místicos.
Enviada a Cattaro (Kotor) como criada de la familia del Senador, Buchi,
que era católica, fue instruida por la dueña de la casa y
se convirtió al catolicismo.
Movida por su devoción a la Pasión de Cristo, quiso
llevar una vida de reclusa y para ello obtuvo licencia episcopal.
Ingresó en la Orden de Penitencia de Santo Domingo, adoptando el
nombre de Hosanna, como Terciaria dominica. Vivió 50 años
dedicada al retiro, recluída en su celda, a la
contemplación y a la caridad. Junto a su celda se
construyó un monasterio, cuyas religiosas se inspiraron en su
vida y palabras, pero sin que ella abandonase su reclusión, ni
hiciese vida de comunidad. Fue maestra de santidad para numerosas
personas, pero sobre todo fue el ángel tutelar de Cattaro. En
tiempos de tantas turbaciones para la Iglesia, se ofreció como
víctima de expiación en unión con Cristo los
pecados del mundo. Su cuerpo es venerado en la iglesia de Santa
María de Cattaro. El 21 de
diciembre de 1927, el Papa Pío XI, confirmó su culto.